No es sorpresa para nadie, que en un mundo de consumo donde los recursos no son infinitos, en algún momento de nuestras vidas (o las de nuestros hijos) veremos y seremos afectados de forma directa por todo lo que consumimos y producimos. En ese sentido el cambio climático, es sólo una expresión más del sufrimiento que lleva la Tierra y las especies que coexisten con nosotros debido principalmente a nuestra existencia y manía derrochadora.
Imaginemos por un momento, que pasaría si aumentamos en 2°C la temperatura. Por un lado, sería triste intentar sopesar el calor con un helado que estaría derretido, no?. Por otra parte, si estuvieramos enfermos con 39°C de fiebre en el cuerpo, que de por sí ya es terrible, no nos gustaría recomendarles estar con 41°C con un shock térmico. Dando un ejemplo más categórico, este aumento de temperatura es propicio para nuevos y peores incendios que hemos vivido en Chile en el último tiempo en gran parte de las regiones como también la sequía que viven localidades que no tienen acceso a agua, debiendo conseguirla a través de camiones aljibe que deben llegar pasando por largas distancias.
En este sentido, los datos nos cuentan como a través de la historía de la humanidad han existido anomalías en las temperaturas de la Tierra. Notando que existía en un cierto periodo una estabilidad aparente, sin embargo a partir de 1920 existe un quiebre en este equilibrio, gatillando un aumento sostenido de las temperaturas hasta la actualidad. De forma similar, podemos apreciar el comportamiento de la concentración de CO2 en la atmósfera, que, a partir de la revolución industrial posee un crecimiento exponencial. De alguna forma, estos datos poseen una correlación sospechosa (No lo sé, rick…), y para ello necesitaremos llamar a nuestro “experto” en medioambiente para que nos de luces al respecto.
¿Por qué sucede esto? (Comentado por: “El experto”)
Principalmente debido a las emisiones contaminantes de los diferentes rubros de producción y sus concentraciones que se van acumulando a través de los años en la atmosfera. En la primera imagen, se puede apreciar que la industria energética (25%), la agrícola (20.4%) y la industria (17,9%) son las mayores contaminantes y para nuestra sorpresa (o esperamos que para el lector lo sea) nos encontramos que los paises culpables de esto en el planeta son Estados Unidos, China y Rusia, seguido de Japón, Alemania e India.
¿Qué efectos directos vemos?
Podemos mostrar inicialmente 2, uno respecto a los cambios de temperatura que sufrirá el planeta durante los próximos años como también la pérdida de la capacidad que tiene el planeta de regenerar los recursos que posee y absorber los desechos generados por los humanos.